Clínica dental Boca&Boca Málaga Costa del Sol Gingivitis

 

La gingivitis es sinónimo de la inflamación gingival, es una infección causada por la acumulación de la placa dental que se encuentra en contacto con la fibromucosa gingival. La aparición de daño en el tejido es totalmente reversible luego de que la flora bacteriana ha sido eliminada.

El cuadro clínico de una gingivitis crónica generalmente pasa desapercibido ya que la instalación de la condición se da de una manera discreta. Los primeros síntomas de la gingivitis crónica incluyen el incremento en el volumen del líquido gingival, así como la tendencia al sangrado de la fibromucosa gingival. La gingivitis crónica se desarrolla casi siempre sin presencia de dolor, por eso los que la padecen no se dan cuenta de lo que les está sucediendo, llegando entonces las complicaciones.

Clínica dental Boca&Boca Málaga Costa del Sol Gingivitis

Sin embargo, el dentista se encarga de ver los signos clínicos que ayudan a determinar si se trata de una gingivitis crónica, dentro de dichos signos se incluyen cambios en el color, consistencia, textura y volumen en el contorno gingival.

La gingivitis crónica se puede presentar en un diente, un grupo de dientes, o bien de manera generalizada en todos los dientes. La intensidad de la respuesta inflamatoria de las encías depende de la naturaleza bacteriana así como de las capacidades de defensa y regeneración del organismo, por eso en ocasiones un bajo sistema inmunológico puede propiciar el óptimo desarrollo de la gingivitis crónica.

La placa se encuentra directamente relacionada con la gingivitis crónica, en la placa comienzan a generarse las bacterias que empiezan a colonizarla, y comienza a hacerse mas rica conforme van a apareciendo nuevas bacterias. La capacidad de la placa de adherirse al diente es una característica importante, y es por eso que se convierte en un potente desencadenante de la gingivitis crónica. Para desencadenar una gingivitis crónica debe haber una acumulación de bacterias así como una concentración de patógenos en la superficie del diente, lo que da lugar a la presencia de la flora bacteriana cuyos cambios son los que fortalecen a las bacterias, acostumbrándose al PH de la zona y por ende se vuelven más resistentes.

Existen factores locales que agravan a la gingivitis y la llegan a convertir en una crónica, por ejemplo las restauraciones dentales defectuosas, una mala posición dental donde se desbordan los límites cervicales, lo que generalmente se da en tratamientos de ortodoncia.

Aunque la mineralización de los dientes no afecta por sí misma a la salud gingival, es de señalar que entre más rugosa y porosa se encuentre, puede ser un factor agravante de la gingivitis crónica.

El tratamiento de la gingivitis crónica es un tratamiento local en el que incluye un control de la placa bacteriana, así como la corrección y/o eliminación de los factores locales que agravan la retención de la placa, el dentista estudiará el caso particular del paciente y determinará el mejor tratamiento basado en su historia particular.


La importancia de lavarse los dientes no sólo radica en cuestiones de higiene y de un buen aliento, en realidad su importancia radica en aspectos que van relacionados con bacterias, enfermedades y complicaciones que pueden llevar a la perdida de uno o varios dientes.

Los dientes no se encuentran aislados, en conjunto forman la boca de un ser humano, en un lugar húmedo y caliente en el que se desarrollan gran cantidad de bacterias. Cuando comemos o bebemos, queda una fina capa de restos de comida que se va depositando en los dientes, si los dientes no se lavan, esa capa comenzará a capturar más restos de comida. Esto da lugar a la placa que comienza no sólo a desarrollarse sino también a fortalecerse por la presencia de las bacterias, una vez que la placa ha avanzado comienza a endurecerse lo que da lugar a la presencia del sarro. Y entonces es cuando comienza un círculo vicioso entre residuos de comida, bacterias, placa y más sarro, además las bacterias transforman al resto de comida en ácidos, y ese ácido ataca a los dientes y sus cavidades de manera directa.

Clínica dental Boca&Boca Málaga Costa del Sol Gingivitis

Esa orquesta entre bacterias, placa y sarro son factores que desencadenan enfermedades bucales y es que generalmente se nos olvida que la salud de los dientes depende de la salud de las encías y del hueso que las apoya, por eso si las bacterias no se detienen a través de un lavado de dientes, éstas llegan hasta las encías y los huesos que sostienen a los dientes, lo que da lugar a enfermedades como la gingivitis y la periodontitis, y como la gingivitis es un tanto silenciosa los síntomas aparecen cuando ya se ha instalado, mostrando una inflamación de las encías causada por una capa compuesta de bacterias, saliva y partículas de alimentos.

Es por lo anterior que para proteger a los dientes del ácido y las bacterias es una obligación cepillarse los dientes después de cada comida. El cepillado remueve los restos de comida y ayuda a reducir la placa, además que lavarse los dientes es también una de las mejores armas contra la caries dental.

Se recomienda lavarse los dientes después de cada comida, sin embargo ante la posibilidad de no hacerlo por el trabajo y estar fuera de casa, los dentistas recomiendan hacerlo dos veces por día. Se aconseja el cepillado con un cepillo de cerdas suaves para que no lastimen a las encías, y deberán cepillarse las superficies exteriores, las superficies internas así como las superficies de masticación, tomando el tiempo necesario para eliminar los restos de comida. Como complemento al lavado de dientes se aconseja el uso del hilo dental para terminar por retirar los restos de comida presentes entre los dientes y que el cepillado no pudo eliminar.


La gingivitis se conoce como una enfermedad donde las encías se encuentran inflamadas y que a veces es acompañada por la inflamación de la mucosa bucal, lo que se conoce como “estomatitis” o “gingivoestomatitis”. La gingivitis puede ser aislada o bien ser un síntoma de alguna enfermedad infecciosa. La causa más común es la falta de higiene y/o la presencia de sarro.

Existen varias etapas en la gingivitis, que van desde la etapa temprana hasta la crónica que deriva en una periodontitis. A los primeros síntomas de gingivitis se recomienda la visita al dentista, el profesional de la salud sabrá tratarla y en unos cuantos días estarás libre de las encías hinchadas y el molesto sangrado durante el cepillado.

Si la gingivitis no es tratada a tiempo, o no se toman medidas para mitigar sus manifestaciones, entonces se habla de la presencia de una gingivitis aguda, esto ocurre porque la evolución de la gingivitis generalmente se da de una manera silenciosa, además muchas personas piensan que el sangrado crónico durante el cepillado es normal, pero en realidad no es nada normal y está manifestando la presencia de una gingivitis.

La gingivitis aguda puede mostrar lesiones inflamatorias en las encías, cuando ya ha evolucionado hasta el grado de aguda las lesiones alcanzan a las gomas y comienzan a difundirse por toda la cavidad oral. Es de mencionar que en una gingivitis aguda las lesiones pueden comenzar a degenerar el hueso, y esto ya es irreversible.

Cabe señalar un caso particular relacionado con la gingivitis aguda que no tiene que ver con la evolución de la gingivitis de origen bacteriano. En algunos casos una gingivitis aguda, puede responder a un origen de tipo viral. En este caso la lesión primaria de los tejidos es rápidamente reemplazada por la erosión. Los virus pueden ser un tipo de herpes, como el herpes primario o el herpes zoster, también se ha encontrado involucrado el virus coxsackie, que es el responsable del síndrome de mano-pie-boca que se caracteriza por la presencia de ampollas rojas en la garganta, boca y encías, y que es más común en los niños.

En los casos de una gingivitis aguda como producto de una infección herpética se hace uso de medicamentos aplicados por vía intravenosa y además de recomendaciones como masajes en las encías para mitigar el dolor y reducir la inflamación.

Otra posibilidad relacionada con la gingivitis aguda responde a la deficiencia directa de vitaminas como la B12, zinc, ácido fólico y ferritina, el diagnóstico es realizado por el dentista quien podría recetar un complemento vitamínico además de un especial cuidado bucal.
 

La gingivitis es una enfermedad de tipo periodontal que se da cuando la infección ha sido producida dentro y alrededor de las encías. Comúnmente se manifiesta con el sangrado de las encías. La causa principal de la gingivitis es una mala higiene bucal, es por esto que el cepillado adecuado es el principal medio para prevenir la aparición de esta condición. Cabe señalar que una visita al dentista de manera anual podría ser la mejor manera preventiva, sin embargo si la gingivitis se encuentra ya presente en una etapa primaria, es posible hacerle frente con remedios caseros para mitigar el dolor y bajar la hinchazón de las encías. Dentro de los remedios caseros más eficaces se encuentran:

    Aceite de árbol de té: Tiene grandes propiedades antisépticas que ayudan a luchar contra este tipo de infecciones, se recomienda que antes del cepillado se aplique una gota de aceite de árbol de té en la pasta de dientes y cepillar. Ayuda a mitigar el dolor y la irritación causada por la gingivitis.

    Aceite de clavo: Una o dos gotas de aceite de clavo frotadas en las encías infectadas durante unos minutos generan un efecto positivo en el dolor. Si no puede encontrar aceite de clavo puedes optar por masticar un clavo entero, permitiendo que el zumo que produce entre en contacto con las encías.

    Agua salada: Un remedio eficaz para tratar la gingivitis. Se recomienda añadir una pizca de sal en agua tibia y mezclar bien. Se deberán hacer buches y gárgaras con esta solución, gracias a la sal podrá reducir la inflamación de las encías casi de manera instantánea. El procedimiento debe realizarse dos veces al día.

    Pasta de plantas: Un remedio casero que ha estado presente por generaciones y que ha mostrado su eficacia en la lucha contra la gingivitis. Se prepara una pasta con dos cucharadas de hierba de corteza de roble blanco, una cucharada de hierba mirra goma, media cucharada de hojas de menta, y unos cuantos dientes de té de anís. Pulverizar estos ingredientes hasta tener un polvo fino. Añadir agua destilada hasta obtener una pasta espesa. Se recomienda usar una cucharada de esta pasta en el cepillo de dientes y cepillar durante cinco minutos. Cuanto más la pasta permanezca dentro de la boca más bacterias matará.

    Vinagre de manzana: Mezclar una cucharada de vinagre de sidra de manzana con media taza de agua, tomar un sorbo de la mezcla y mantener en la boca durante un minuto. Se recomienda no mantener la mezcla mucho tiempo dentro de la boca ya que el componente ácido puede dañar el esmalte dental.

Finalmente, es de mencionar que una dieta equilibrada es básica para mantener la salud bucal cuando se está presentando un cuadro de gingivitis, alimentos crujientes y fibrosos como la manzana y zanahorias son buenos para darle masaje a las encías mientras mastica. La vitamina C es otro de los remedios naturales para la gingivitis, se aconseja la ingesta de cítricos ricos en vitamina C, así como evitar el azúcar, los refrescos y alimentos con alto contenido de grasas.

WhatsApp chat